Çakraz - Kuşçu Köyü Plajı

Hoy hemos llegado al paraíso. Bueno… al menos se parece un poquito.
El camping donde dormimos no estaba nada mal. Es decir - dormimos bien. Aunque mi papi se quejó de la ducha (que estaba fría - y el váter (que era modelo turco, pero me parece lógico ya que estamos en Turquía. Nuestros vecinos alemanes-turcos se despidieron por la mañana y nosotros nos quedamos hasta después de la comida.
En coche seguimos la carretera litoral. Al principio pintaba muy bien; es una autovía con muchos túneles. Pero ya pronto cambió a una carretera con muchos baches y muchísimas curvas. Hicimos una breve parada en una playa porque necesitaba estirar un poco mis patitas. Incluso nadé un poco en el mar.
Luego paramos un rato en el puerto pesquero de Cide para ver las opciones de pernocta. Podíamos habernos quedado en el mismo puerto, había espacio de sobra y unos pequeños parques, pero nada de sombra para aparcar la cámper y no me parecía muy atractivo.
Entonces seguimos unos veinte minutos más y bajamos en coche desde la carretera hasta llegar a esta playa donde sí vamos a dormir. A mi papi le daba un poco de miedo conducir por la playa porque la arena es súper blanda y profunda. Pero ya había otro coche todoterreno y esto daba confianza. El propietario del otro coche es un tío de Austria. Se llama Mark y es muy majo. Por la tarde se acercó con su silla, su cerveza y algo para picar, y pasó toda la tarde charlando con mi papi. Cuando se fue el sol, enseguida comenzó a hacer un poco de frío pero mi papi y Mark buscaron trocitos de madera en la playa e hicieron un fuego para quedarse calentitos. A mi me parece muy bonito el fuego, pero un lado de mi cuerpo se quedó helado mientras el otro lado estaba asado. En la cama en la cámper estoy mejor y aquí me quedo.